La Organización Mundial de la Salud establece que el uso de materias primas seguras, así como su adecuado manejo, procesamiento y almacenamiento, son determinantes para promover el consumo seguro de alimentos.

¿Por qué se procesan los alimentos frescos?

El consumo de alimentos frescos, percibidos como “naturales”, requieren de un mínimo procesamiento para evitar enfermedades causadas por malas prácticas sanitarias. La adecuada selección, manipulación y conservación de estos productos, determinan en gran medida su inocuidad. De esta forma, el lavado, desinfección y tratamientos térmicos que se apliquen a los alimentos, evitarán que se conviertan en causa de intoxicaciones o infecciones alimentarias.

¿Cómo se regula el procesamiento de alimentos?

Las normas oficiales establecen los parámetros fisicoquímicos, microbiológicos y toxicológicos que deben cumplir las materias primas y productos finales que se obtienen tras el procesamiento de alimentos, con el fin de asegurar los estándares de calidad e inocuidad que garanticen el consumo de alimentos nutritivos y seguros.

En el caso de los productos envasados, es obligatorio mostrar la información nutrimental y el uso de ingredientes que podrían resultar sensibles para ciertos grupos de la población. El conocimiento y manejo adecuado de esta información también ayuda a promover estilos de vida saludable y a tomar decisiones informadas sobre los productos que se consumen.

Mejora constante de productos alimenticios para una mejor salud

El interés por conservar la salud de las personas promueve el desarrollo de productos que mejoran el perfil nutrimental de los alimentos. Hoy día, las principales tendencias se siguen centrando en la reducción de grasas saturadas, azúcares añadidos y sal, pero al mismo tiempo buscan incrementar el perfil de micronutrimentos y fitoquímicos que juegan un papel muy importante para mantener la salud durante todas las etapas de la vida.

Alimentos procesados y su impacto en el valor nutrimental

Contrario a lo que se piensa, el procesamiento de alimentos puede favorecer el valor nutrimental de los productos; por un lado, se puede reducir la presencia de antinutrimentos y, por otro, se puede incrementar la biodisponibilidad de algunos fitoquímicos cuando se comparan con los productos en su versión en fresco.

Por ejemplo, los niveles de algunos precursores de vitamina A y de licopenos se incrementan tras los procesos térmicos a los que se someten productos como el jitomate.

Otro ejemplo del beneficio de los procesos alimentarios se puede observar con los productos fermentados, a partir de los cuales se pueden integrar probióticos a la dieta, con un probado beneficio a la salud.

Procesamiento de alimentos para reducir riesgos a la salud

Adicionalmente, el procesamiento de alimentos puede disminuir el contenido de agentes tóxicos, como sucede durante la elaboración de pastas alimentarias, en donde, a través del proceso de molienda, se reduce la presencia de metales pesados. Algo parecido sucede con los alimentos enlatados y congelados, pues hay evidencia que demuestra que tras el proceso térmico del enlatado o durante la descongelación, los niveles de metales pesados también se ven disminuidos.

Alimentos inocuos y variados para todos

Los alimentos procesados industrialmente ofrecen al consumidor una alternativa para integrar alimentos seguros y variados a la dieta, que se adapten al estilo de vida y necesidades particulares de cada persona. En la actualidad, uno de los retos que enfrenta la industria de alimentos es garantizar el suministro seguro de productos a través de una red compleja en la que el diseño y ejecución de procesos debe ser cada vez más eficiente y sostenible. La tecnología alimentaria es una gran aliada en términos de selección, conservación, procesamiento, envasado, distribución y uso seguro de los alimentos.

Menos desperdicio, más alimentos

Actualmente, el procesamiento de alimentos se enfoca en reducir los desperdicios y hacer procesos más sustentables, haciendo así un uso más eficiente de las materias primas.

Las tecnologías alimentarias contribuyen a mejorar las propiedades funcionales y a hacer más rentables los procesos, por ejemplo, mediante el uso de enzimas, con las que se pueden producir edulcorantes, separar mezclas y aumentar la producción de algunos péptidos.

Sustentabilidad en el procesamiento de alimentos

A través de la aplicación de las normas internacionales ISO 14000, la industria de alimentos busca reducir los diferentes tipos de residuos que se generen, así como tratar las aguas residuales, promover el reciclado, reutilización de residuos y empaques y de igual forma promueve el uso consciente de recursos y de energía.

Como se puede ver, el procesamiento de alimentos tiene diversas aportaciones que logran que tengamos alimentos seguros para todos, libres de sustancias tóxicas, que favorecen la nutrición, evitan el desperdicio y promueven la conservación de los recursos.